Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) indican que la variante BA.2.86 con alta mutación puede ser más capaz de causar infección en personas que previamente tuvieron COVID-19 o fueron vacunadas con dosis anteriores, señalando que las vacunas COVID-19 actualizadas pueden ser eficaces para reducir la enfermedad grave y la hospitalización.
“Estos resultados demuestran que nuestra vacuna COVID-19 actualizada genera una fuerte respuesta humana inmunitaria contra la variante BA.2.86 que presenta una alta mutación. Junto con los datos comunicados anteriormente, que demuestran una respuesta igualmente eficaz frente a las variantes EG.5 y FL.1.5.1, se confirma que nuestra vacuna COVID-19 actualizada seguirá siendo una importante herramienta de protección de cara a la temporada de vacunación de otoño”, afirmó el Dr. Stephen Hoge, Presidente de Moderna. “Moderna seguirá evaluando rápidamente las amenazas para la salud pública mundial y se compromete a aprovechar nuestra plataforma de ARNm contra el COVID-19”.
Las autoridades de salud pública están vigilando atentamente la variante BA.2.86, una cepa de COVID-19 con un alto grado de mutación, con más de 30 modificaciones en comparación con las cepas Ómicron anteriores, y algunos gobiernos están acelerando las campañas de vacunación contra COVID-19 debido a su potencial para romper la inmunidad protectora generada por la vacunación o infección previa con COVID-19. La aparición de BA.2.86, además de la creciente prevalencia de las variantes EG.5 y FL1.5.1, subraya la necesidad de la inmunización con una vacuna COVID-19 actualizada, que puede ayudar a reducir la enfermedad grave y las hospitalizaciones causadas por las cepas que circulan actualmente.
Los datos de los ensayos clínicos de Moderna sobre la eficacia de la vacuna COVID-19 actualizada contra la variante BA.2.86 se han comunicado a las autoridades regulatorias y se han presentado para su publicación.
Redacción MD