Ante este panorama que se presenta año con año, la asociación ha impulsado actividades permanentes para acompañar a mujeres que enfrentan esta enfermedad, considerada una de las principales problemáticas de salud pública en México. Entre las que destacan la elaboración de más de 448 prótesis mamarias artesanales y 707 turbantes oncológicos durante 2025, que no solo constituyen un recurso tangible en el proceso de recuperación, sino también un gesto de empatía y solidaridad.
Más allá del tiempo invertido, cada voluntario aporta fuerza y esperanza, generando un impacto que trasciende lo material y fortalece a las comunidades apoyando en los últimos años a más de 2,500 personas.
“El voluntariado corporativo ya no es un extra, es parte del ADN de las empresas competitivas. Integrarlo a la estrategia no solo transforma comunidades y organizaciones, también impulsa causas como la lucha contra el cáncer de mama”, señaló Raquel Origel Puertas, directora general de Voluntarios México.
El apoyo a mujeres que enfrentan esta situación es solo un ejemplo de cómo el voluntariado puede mejorar vidas, generar conciencia y construir una cultura empresarial más humana y sostenible.
Redacción MD

















